Alimentos de temporada de enero: las frutas y verduras que debes comer en el primer mes del año
Enero nos recibe con una amplia variedad de frutas y verduras de temporada, ideales para disfrutar del sabor, aroma, textura y calidad nutritiva que los alimentos presentan en el primer mes de año.
Enero marca el inicio de un nuevo año, y con él llega una nueva selección de frutas y verduras de temporada que, como sabemos, siempre destacan por su frescura y sabor, así como por sus beneficios nutricionales.
Consumir productos de temporada es una excelente manera de apoyar a los agricultores locales, reducir la tan comentada y cuestionada huella de carbono y disfrutar de los alimentos en su mejor momento.
Los beneficios de consumir productos de temporada
Elegir frutas y verduras propias de la época tiene múltiples ventajas, entre ellas la de conseguir el mayor sabor, aroma y textura de cualquier producto, por tanto, hacer de la comida una experiencia auténtica.
Mayor frescura y sabor
Los productos de temporada se cosechan en su punto óptimo de madurez, lo que garantiza un mejor sabor y textura.
Más nutrientes
Al recolectarse en su momento adecuado, conservan sus propiedades nutricionales al máximo.
Sostenibilidad
Al ser locales, requieren menos transporte y almacenamiento, lo que reduce las emisiones de carbono.
Ahorro económico
Los alimentos de temporada suelen ser más asequibles debido a su abundancia.
Frutas de temporada en enero
En el mes de enero, el invierno está en pleno apogeo, y las frutas cítricas dominan el mercado de los productos temporales. Estas son algunas de las frutas que puedes disfrutar este mes:
Naranjas
Ricas en vitamina C, las naranjas son ideales para fortalecer el sistema inmunológico durante los meses fríos.
Mandarinas
Dulces, fáciles de pelar y muy refrescantes.
Limones
Una fuente versátil de vitamina C, perfecta para infusiones calientes o para aliñar ensaladas.
Pomelos
Con su sabor agridulce, los pomelos son refrescantes y ayudan a desintoxicar el organismo.
Manzanas
Disponibles en diversas variedades, las manzanas son ricas en fibra y antioxidantes.
Peras
Jugosas y deliciosas, las peras aportan hidratos de carbono saludables y son fáciles de digerir. Tanto las peras como las manzanas tienen varias épocas de temporada, ya que durante el verano también se pueden disfrutar, dependiendo de la zona geográfica.
Kiwi
Este pequeño fruto verde es una bomba de vitamina C y fibra.
Verduras de temporada en enero
Las verduras de invierno destacan por ser resistentes y versátiles, perfectas para sopas, guisos y platos al horno. Algunas de las más comunes en enero son:
Coliflor
Rica en vitaminas C y K, es ideal para cremas, asados o como base de recetas bajas en carbohidratos.
Brócoli
Una excelente fuente de fibra, vitaminas y antioxidantes, perfecto para salteados o al vapor.
Espinacas
Versátiles y nutritivas, las espinacas aportan hierro y vitamina A, ideales para ensaladas o platos calientes.
Acelgas
Esta hoja verde es rica en calcio, magnesio y antioxidantes, y se adapta a recetas como tortillas o guisos.
Zanahorias
Con su característico color naranja, son una fuente de betacarotenos y vitaminas esenciales.
Puerros
Ideales para dar sabor a caldos, sopas y cremas debido a su sabor suave y dulce.
Coles de Bruselas
Estas pequeñas coles son ricas en vitaminas y minerales, y pueden cocinarse al vapor, asadas o salteadas.
Nabos
Una raíz versátil que aporta vitaminas y fibra, perfecta también para sopas y guisos.
Consejos para aprovechar al máximo las frutas y verduras de enero
Por último, resulta conveniente conocer algunos consejos que pueden repercutir en la forma en que disfrutamos de la fruta y verdura cosechada y comercializada en temporada.
Algunos actos que podemos hacer para conseguir alimentos de calidad y al mismo tiempo ayudar a los pequeños agricultores son los siguientes.
- Comprar en mercados locales: así garantizamos productos frescos y apoyamos a los agricultores de nuestra región.
- Almacenarlos adecuadamente: conservar las frutas y verduras en un lugar fresco y seco para prolongar su frescura.
- Probar nuevas recetas: experimentar con sopas, guisos, ensaladas y platos horneados para aprovechar la diversidad de productos disponibles.
- Hacer conservas y mermeladas: si compramos en grandes cantidades, podemos preservar el exceso de frutas y verduras para usarlas más adelante.