5 plantas de exterior resistentes al frío y las heladas
Cuando el invierno se acerca, muchas plantas de jardín suelen sufrir por las bajas temperaturas, lo que deja a los aficionados de la jardinería buscando especies que resistan a heladas y climas gélidos. Toma nota, aquí tienes cinco.
A poco menos de dos meses para que dé comienzo el invierno, es buen momento para ir preparándonos a él, especialmente si eres amante de las plantas y quieres que algunas de ellas lleguen a primavera. Y es que existen algunas plantas que, además de soportar el frío, aportan belleza a los exteriores incluso en época invernal.
La hiedra, la planta todoterreno del invierno
Empezamos por una de las más resistentes al frío, y por tanto, la mejor aliada en jardines expuestos a bajas temperaturas: la hiedra (Hedera helix). Esta planta trepadora de hoja perenne se adapta a casi cualquier condición climática y es capaz de soportar temperaturas bajo cero, llegando a tolerar hasta -10 ºC sin problema. Su fortaleza es tan notable que, con el cuidado adecuado, puede sobrevivir a heladas prolongadas, manteniéndose verde y frondosa durante todo el año.
Además de ser sumamente resistente, la hiedra es una planta de crecimiento rápido, lo que la convierte en una opción excelente para cubrir muros, vallas o pérgolas, aportando un toque de verdor incluso en invierno. Además no requiere mucho riego y se adapta a distintas condiciones de luz, aunque prefiere sitios semi-sombreados.
El ciclamen, una ola de color en plena helada
La violeta persa o ciclamen (Cyclamen persicum) es otra opción interesante para los jardines de invierno. Esta planta destaca por sus flores en tonos rosados, rojos y violetas, que aparecen justo en los meses fríos. Aunque es una planta de exterior, necesita protección contra heladas intensas, soportando temperaturas de hasta -5ºC.
Lo ideal es situar esta planta en lugares frescos y semi-sombreados, y para protegerla de heladas intensas, se puede cubrir con una tela durante las noches más frías, pero sobre todo recordar que el agua estancada es perjudicial para sus raíces.
El jazmín de invierno, una fragancia y un color que desafían el frío invernal
El jazmín de invierno (Jasminum nudiflorum) es conocido tanto por su resistencia al frío como por el agradable aroma de sus flores. Aunque existen distintas variedades, el de invierno soporta temperaturas bajas de hasta -10ºC y es una excelente opción para climas fríos. Sus flores amarillas aparecen durante el invierno, aportando color y aroma al jardín en los días más grises.
Este tipo de jazmín es una planta trepadora que necesita una estructura de apoyo para crecer, como una pérgola o enrejado. Prefiere un suelo bien drenado y una exposición soleada o semi-sombra, pero es que además es muy fácil de mantener, ya que solo necesita podas leves después de la floración y riego moderado, lo que la hace ideal para jardineros con poca experiencia o tiempo.
La adelfa, una belleza rústica y resistente
La adelfa (Nerium oleander) es una planta rústica que, aunque es más habitual en climas cálidos, también es capaz de resistir temperaturas cercanas a los 0 ºC, soportando ocasionalmente hasta -5 ºC en zonas bien protegidas.
Aunque la adelfa puede resistir heladas leves, necesita ciertos cuidados en invierno, como protegerla de los vientos fríos. Prefiere suelos bien drenados y una ubicación soleada, ya que el sol contribuye a su fortaleza. Eso sí, hay que tener muy en cuenta que es una planta tóxica, por lo que se recomienda tener precaución si hay mascotas o niños pequeños en el hogar.
El color y la resistencia en climas templados de la buganvilla
Acabamos este repaso con la buganvilla (Bougainvillea), una de las plantas trepadoras más populares por su capacidad de aportar color y vida a los muros y jardines. Aunque no tolera heladas fuertes, es capaz de resistir temperaturas cercanas a los 0 ºC, por lo que es ideal en zonas con inviernos templados.
Este tipo de planta destaca por sus brácteas de colores vivos rosas, púrpuras y anaranjadas que crean un efecto visual impactante en exteriores. Para protegerla del frío se recomienda plantarla en lugares protegidos del viento y, si es posible, cubrirla en noches de helada.
En cuanto a su mantenimiento, la buganvilla prefiere suelos bien drenados y una buena exposición al sol, ya que la luz solar potencia sus colores y fortalece su crecimiento. Durante el invierno, es recomendable reducir los riegos para evitar el exceso de humedad, que puede dañarla.