3 pueblos para enamorarse de la Comunidad Valenciana

Porque cada provincia tiene su encanto, nuestro repaso de hoy nos lleva a visitar tres pueblos ubicados en Castellón, València y Alicante, a los que les une un pasado histórico medieval. ¿Has estado alguna vez?

morella
Sus dos kilómetros de muralla "abrazando" el pueblo, hacen de Morella uno de los pueblos más especiales de la Comunidad Valenciana.

La frase "A l'estiu, tot el món viu", forma parte del refranero popular valenciano. Traducido al castellano significa "en verano todo el mundo vive", y se refiere a esa época de color, alegría y buen tiempo en la que ya estamos entrando, y que todo valenciano, y ciudadano español, sabe disfrutar.

Tres pueblos con encanto en cada una de las tres provincias de la comunidad

Así pues, y antes de que empiece el calor sofocante, qué mejor que visitar algunos de los preciosos pueblos que hay en Castellón, Valencia y Alicante.

Morella, una joya medieval en el norte de Castellón

Vamos a empezar por el norte de la comunidad, en la provincia de Castellón, un pueblo tan especial que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Nos referimos a Morella, lugar que indudablemente destaca por los más de 2 kilómetros de muralla y sus 16 torres que la rodean.

No hay mejor forma de conocerla que perderse por sus estrechas calles adoquinadas para visitar joyas arquitectónicas como la basílica arciprestal de Santa María la Mayor, de estilo gótico, o las pinturas rupestres de Morella la Vella. Y cómo no, su imponente castillo, una de las fortalezas más relevantes del Mediterráneo que han habitado íberos, musulmanes, cristianos y romanos.

Además de la belleza indudable de sus calles, destacan sus palacetes y casas solariegas, pero también su gastronomía y artesanía. Y si uno visita Morella en agosto puede disfrutar del "Sexeni", una original fiesta que sólo se celebra una vez cada seis años, en honor a la Virgen de Vallivana.

Bocairent, pueblo enclavado en las rocas del valle de Albaida

Y del norte nos vamos más al centro de la comunidad, y en concreto viajamos al extremo sur de la provincia de València. Bajo el nombre de Bocairent se encuentra este pueblo que figura en la lista de las 7 maravillas de España.

Sin duda destaca por estar excavado en la roca y por su Barrio Medieval, declarado conjunto histórico-artístico en 1975, con callejuelas laberínticas y escaleras imposibles. Visita obligada es también las "Covetes dels Moros", unas cuevas-ventanas colgadas en un acantilado, situadas en el Barranc de la Fos.

Covetes dels Moros
Detalle de "Les Covetes dels Moros", con habitaciones y pasos verticales y horizontales excavadas sobre la pared montañosa.

Ahí donde la ven, Bocairent tiene un claro pasado islámico que se puede ver en sus calles. De hecho, el origen etimológico de la población proviene del árabe "bakirén" o "bekirent", cuyo significado es piña o colmena. Una clara referencia al modo en el que se fueron edificando las casas alrededor del castillo, como si se hubieran ido amontonando una sobre la otra.

Guadalest, dos castillos y ocho museos en un acantilado

Finalizamos nuestro repaso, como no podía ser de otra manera, en el sur de la comunidad, en la provincia de Alicante. Pertenece a la comarca de la Marina Baja, y su nombre es Guadalest, otro pueblo literalmente para enmarcar.

Guadalest
Este espectacular pueblo alicantino se encuentra a 500 metros de altura sobre el embalse de Guadalest y su casco antiguo es un mestizaje de lo medieval e histórico.

Además de su espectacular entorno, esta localidad alicantina destaca por encima de todo por el Castillo de San José, del siglo XI, una edificación enclavada en lo alto de la montaña, que sirvió como defensa en la época musulmana y durante muchísimos años.

Pese a que ha sufrido varias reconstrucciones debido a diferentes terremotos, el castillo todavía mantiene su esplendor, ese que le llevó a ser declarado Conjunto Histórico-artístico en 1974.

Además de visitar el embalse, otra visita recomendada es, sin lugar a dudas, la de los ocho museos que alberga, entre los que están el de Casa Orduña o el Museo histórico medieval, pasando por colecciones de miniaturas, vehículos antiguos, e incluso museo de saleros y pimenteros. Todo ellos da idea de la riqueza cultural de este pueblo alicantino.