3 pueblos de España con microclima para escapar del calor: veranos cortos y noches frías

Hay algunos refugios climáticos en la Península donde el verano no es sinónimo de calor. En estos pueblos, las temperaturas máximas rara vez alcanzan los 30 ºC y las noches veraniegas pueden llegar a ser frías.

Los valles a gran altura, rodeados de montañas, son los refugios del calor por excelencia debido a una combinación de factores orográficos y climáticos.

Hay algunas zonas de España que se han convertido en refugios climáticos, verdaderos oasis donde las temperaturas son suaves en verano, quedando al margen de la mayoría de olas de calor. Los factores atenuantes del calor en verano son la altitud, latitud y las características geográficas.

Destinos para huir del calor este verano

El calor suele ser más intenso cuanto más al sur, en zonas alejadas del mar y en áreas deprimidas o valles fluviales. Los pueblos que se van a nombrar a continuación no cumplen la mayoría de estas características, haciéndolos aptos para visitar en verano.

Los sombríos valles del Pirineo

En muchas zonas del Pirineo, especialmente los valles de umbría, la media de temperaturas de julio y agosto no llega ni a los 20 ºC. Esto lo convierte en una de las mayores excepciones al calor ibérico. Alp es un municipio catalán situado en el Pirineo a una altitud de más de 1100 metros sobre el nivel del mar. Posee tres núcleos de población con un censo de 1719 habitantes. La altitud y las montañas cercanas, crean un microclima frío en invierno y fresco en verano.

En Alp, el promedio de las máximas en julio y agosto es de 24 y 23 ºC respectivamente, convirtiéndolo en un oasis climático por excelencia. La media de mínimas es de tan solo 12 ºC en el mes más cálido del año (julio) y no es raro bajar incluso de los 5 ºC en plena canícula.

El verano en Alp es corto y son pocos los días que se superan los 30 ºC. En septiembre, las máximas bajan rápidamente del umbral de los 20 ºC y por las noches se sitúan por debajo de los 10 ºC.

Cercedilla

Cercedilla es un municipio situado en la Comunidad de Madrid, al noroeste, en la Sierra de Guadarrama. Tiene una población de casi 8000 habitantes y está conformado por pequeños pueblos envueltos de bellos parajes. Uno de los muchos atributos del lugar es la bonanza térmica en verano.

En el pueblo de Cercedilla, el promedio de temperaturas máximas en julio y agosto es de tan solo 27 ºC, e incluso en los albores de la canícula, la temperatura rara vez sube de los 32 ºC.

Las noches de verano son frescas y para contemplar el firmamento es imprescindible hacer acopio de una manga larga. Las temperaturas mínimas pueden bajar de los 5 ºC en verano y la media de mínimas es de tan solo 12 ºC en los meses más "cálidos", es decir, julio y agosto.

Griegos, el corazón de Albarracín

El pueblo de Griegos, en Teruel, está situado a 1601 metros sobre el nivel del mar, convirtiéndolo en el segundo pueblo a más altitud de España. Además de la altitud, el pueblo está situado en un pequeño valle rodeado de colinas. Esto provoca, que por efecto de la inversión térmica, el aire frío se acumule en los terrenos llanos que rodean el pueblo, pudiéndose registrar mínimas por debajo de -15 ºC en invierno.

Los veranos en Griegos son extremadamente cortos y frescos. La media de las temperaturas máximas es de 24 ºC en julio y agosto, bajando hasta solo 19 ºC en septiembre. Las noches no son solo frescas, sino que será imprescindible usar un edredón, incluso en plena canícula. El promedio de mínimas en julio y agosto es de solo 10 ºC. Además, las tormentas suelen ser frecuentes e intensas en verano.